Génesis 1:28 “Y los bendijo Dios, y les dijo: Fructificad y multiplicaos; llenad la tierra, y sojuzgadla, y señoread en los peces del mar, en las aves de los cielos, y en todas las bestias que se mueven sobre la tierra”.

La familia fue creada por Dios y es el núcleo de la sociedad. Está representada por un grupo de personas, formada por una pareja (hombre y mujer) que tienen un proyecto de vida en común. Es el primer grupo social al cual pertenecemos, constituye un contexto esencial para la construcción del desarrollo individual de todos sus miembros.

Padres y madres, el valor de la familia no se compara con ningún bien. Educar en este tiempo donde los esquemas de formación han variado y hay tanta modernidad no es tarea fácil. Es uno de los más grandes desafíos, requiriendo dedicación, paciencia y mucho amor. Sin embargo, Dios no nos ha dejado solos en esta tarea, Él nos ha dado su Palabra como guía y al Espíritu Santo que nos ayuda en medio de nuestra debilidad. Les exhortamos a poner la vida de nuestros hijos en las manos del Señor, ser firmes y modelar la conducta que deseamos que nuestros hijos aprendan.

FAMILY: GOD’S DESIGN

Genesis 1:28 “And God blessed them, and God said unto them, Be fruitful, and multiply, and replenish the earth, and subdue it: and have dominion over the fish of the sea, and over the fowl of the air, and over every living thing that moveth upon the earth”.

God created the family, and it is the heart of the society. It is represented by a group of people, made up by a couple (man and woman) that have a common life project. It is the first social group to which we belong to, and it constitutes an essential context for the construction of the individual development of all its members.

Fathers and mothers, the value of the family is compared with no other good. Educating in this time where training schemes have changed and there is so much modernity, it is not an easy task. It is one of the greatest challenges, requiring dedication, patience, and a lot of love. However, God has not left us alone in this task, He has given us his Word as a guide and has given us his Holy Spirit who helps us in the midst of our weakness. We encourage you to put your children’s lives in the Lord’s hands, be firm, and model the behavior that you want your children to learn.